La Resolución 267/2024 no solo impide la adhesión de tasas municipales a las boletas de servicios, sino que también autoriza a las distribuidoras de energía a aplicar sanciones y cortar el suministro eléctrico a las empresas provinciales que no cumplan con esta normativa.
Frente a esto, el intendente de San José y presidente del PJ departamento Colón, Gustavo Bastian, expresó: “Obviamente lo que todos los intendentes le manifestamos al gobernador es el impacto económico devastador para los municipios y el perjuicio que genera”. Además, cuestionó el enfoque del decreto: “La medida adoptada por el gobierno nacional desvía la discusión real que se debe dar acerca de cuánto vale la energía y por qué la distribuidora nacional nos compra a los entrerrianos a determinado precio y nos la revende cinco veces más cara”, resaltó en diálogo con Uno.
En respuesta, el gobernador de la provincia, Rogelio Frigerio, propuso ajustes para mitigar el impacto. Entre ellos, reducir la contribución del 8,69 por ciento que actualmente figura en las facturas al seis por ciento, y establecer un porcentaje uniforme del 12 ó 13 por ciento para las tasas municipales en todos los municipios. Sin embargo, esta propuesta generó controversia. Según Bastian, para muchos municipios esta reducción sería inviable: “No te lo va a pagar nadie”, afirmó, haciendo referencia al cobro separado de tasas.
La crisis financiera también afecta a las empresas distribuidoras de energía, ya que los municipios podrían dejar de pagarles, paralizando la gestión de "millones de pesos". Además, Bastian manifestó su preocupación ante una posible propuesta provincial de endeudamiento: “Tomar deuda para hacer desarrollo infraestructura o para llevar adelante obra pública es una cosa; hacerlo para tapar otro agujero es otra”.
En este contexto, los municipios enfrentan una creciente carga administrativa y económica, asumiendo responsabilidades que antes eran cubiertas por el Gobierno nacional y provincial. Según Bastian, “si los recortes de ingresos persisten, las consecuencias van a ser más tremendas de lo que se está viendo hoy”. La incertidumbre sobre soluciones concretas aumenta la preocupación entre los jefes comunales.
La crisis financiera no solo pone en riesgo la sostenibilidad económica de las comunas, sino también su capacidad para brindar servicios esenciales a los vecinos. En San José, por ejemplo, el pago de tasas municipales alcanza el 70 por ciento, una cifra que podría desplomarse si no se encuentran alternativas viables para enfrentar esta situación.