De acuerdo al meteorólogo Leonardo De Benedictis de Meteored Argentina, desde septiembre se observan precipitaciones por encima de los valores promedio en el Litoral, norte de Buenos Aires y toda la franja este del país, respondiendo al patrón típico del fenómeno durante diciembre.
Las lluvias seguirán siendo superiores a lo normal en el centro y norte, donde la sequía se encuentra en retirada, mientras que en otras áreas todavía persiste.
En cuanto a temperaturas, se prevén valores levemente altos en el norte. No obstante, en el centro este y gran parte de la Patagonia las marcas serán cercanas a la media, por lo que la probabilidad de olas de calor será baja, a diferencia de lo ocurrido en diciembre pasado.
De este modo, el inicio del verano estará condicionado por El Niño, trayendo lluvias en varias zonas agrícolas tras meses de escasez hídrica, aunque sin indicios de calores extremos generalizados.