Si bien el porcentaje de 45,45 por ciento podía llegar a conformar las expectativas del sector, luego en el Congreso Extraordinario surgieron diferencias con la cantidad de tramos en que se iba a pagar el aumento: 21,21 por ciento en marzo, un 8,08 por ciento en mayo, 8,08 por ciento en agosto y 8,08 por ciento en septiembre.
Según surgió de la evaluación en las asambleas departamentales, los docentes exigían que se modificara ese esquema, pasando de cuatro tramos a tres, lo que en definitiva inclinó la balanza a favor de un paquete de medidas de fuerza.
De esta forma el inicio del ciclo lectivo se vio afectado por cuatro paros, a lo que se sumó otra jornada sin clases debido a la adhesión al Paro Internacional de la Mujer Trabajadora. Más allá de esto, la administración Bordet convocó a una nueva reunión paritaria, aunque la dirigencia del sindicato decidió no asistir.
Esa decisión generó más distancia entre las partes y a su vez causó un estancamiento en las negociaciones entre el Ejecutivo y los cuatros gremios docentes que participan de la negociación salarial.
Esta semana podría ser decisiva respecto de una problemática que no solamente tiene en vilo al Gobierno y a los trabajadores de la educación, sino también a las familias que procuran una educación de calidad para sus hijos. AGMER definió un nuevo Congreso Extraordinario para este miércoles en Villaguay, donde se decidirá la estrategia a seguir, mientras se aguarda una señal del Poder Ejecutivo.
Son las bases las que decidirán en asambleas que comenzaron este lunes en escuelas, y que seguirán este martes en los diferentes niveles en los turnos mañana y tarde.
Fuente: Uno