Además de los hogares, el pontón flotante, que se mantiene a flote en el río, fue arrastrado hasta la orilla, causando daños considerables.
La situación se complicó aún más con la afectación a infraestructuras y servicios públicos en la zona, lo que se suma a los estragos provocados por la tormenta.
Las autoridades locales están trabajando en la evaluación de los daños y brindando asistencia a los afectados.
Se espera que en las próximas horas se realicen esfuerzos de reparación y apoyo a las familias que han perdido sus techos y enfrentan la difícil tarea de reconstruir.