De acuerdo a la información policial, la denuncia revelaba que la asociación médica había estado recibiendo órdenes de consulta emitidas por un reconocido cardiólogo de la ciudad, a pesar de que el profesional se encontraba postrado en cama debido a una enfermedad terminal desde hace aproximadamente seis meses. Estas órdenes de consulta se presentaban para su tramitación ante la mutual correspondiente, solicitando que se abonara la consulta al médico.
La agente fiscal a cargo del caso asignó la investigación a agentes de la División de Investigaciones, quienes determinaron que las personas involucradas en el delito eran familiares directos del médico.
Como resultado de las diligencias, se llevaron a cabo allanamientos y registros domiciliarios en las viviendas de los investigados, así como en la clínica registrada a nombre de la ex pareja de uno de los familiares implicados.
Los allanamientos tuvieron resultados satisfactorios, ya que se logró el secuestro de cuatro teléfonos celulares, cinco computadoras portátiles, recetarios, sellos, talonarios y documentación relevante. 
Este operativo representa un importante avance en la desarticulación de una red de defraudación en el ámbito médico. Las autoridades continúan trabajando en el esclarecimiento de los hechos y se espera que la investigación arroje más detalles sobre el alcance de esta actividad ilícita y las responsabilidades involucradas.
