Se reportó también la voladura del techo de un gimnasio y daños en paredes en Claypole, sumado a calles anegadas y cortes eléctricos.
En tanto, La Plata fue una de las ciudades más afectadas, con inundaciones, vehículos arrastrados y árboles caídos. En Quilmes, vecinos compartieron imágenes de agua acumulada.
El servicio ferroviario sufrió demoras y suspensiones en varios ramales por las complicaciones meteorológicas.
El diluvio y el viento generaron un panorama complejo con evacuaciones, vehículos varados, cables caídos y árboles derribados en diversos puntos de la Región Metropolitana de Buenos Aires.
La Defensa Civil local permaneció alerta ante las emergencias derivadas del episodio.
En la zona central del país, sobre todo en el interior de la provincia de Buenos Aires, cayó mucho granizo.
La tormenta supercelda ya se siente en algunas zonas del conurbano bonaerense y amenaza con llegar en breve a la Capital Federal.
Y esto lo pueden asegurar bien los vecinos de la zona central del país que fueron testigos de algunas granizadas impresionantes, con piedras que llegaron al tener el tamaño de una pelota de tenis.