Desde el municipio de San Salvador, colocaron un tanque de agua de 90 kilos y 800 litros, que se agregó a otro de 300 que estaba colocado, debido que no daba abasto para proveer del líquido a los baños de la Terminal.
Aparentemente, luego de ser colocado no resistió tanto peso y se vino abajo.
El comedor estaba cerrado por vacaciones hasta los primeros días de febrero y afortunadamente no había nadie en el lugar.
Luciana Barrientos, moza encargada del lugar, contó a MERCURIO NOTICIAS que se encontró con una "mini piscina" cuando llegó al comedor, puesto que unos mil litros de agua cayeron junto con el techo, puesto que también cayeron ambos tanques y se rompieron.
El impacto afectó una par de sillas y mesas y levemente una heladera exhibidora, además golpeó un aire acondicionado.
Este lunes cerca de las 11:00 arribaban las chapas para recambiar el techo, pudo registrar este medio.