Jueves, 24 de Junio del 2021 - 09:38 hs.
*Por Nelson Lalanda
Editor responsable de MERCURIO NOTICIAS
Primero fueron los concejales del oficialismo que en el
marco de la marcha del 25M,
acusaron a los comerciantes de hacer política y se
pusieron en contra a gran parte de la sociedad. Además, para desarticular la
movilización, utilizaron a los muertos por Covid-19.
Posteriormente, el concejal oficialista Matías Rodríguez
publicó
un posteo en contra del Centro Económico, que luego borró.
En el marco de la marcha por el 25M, fue consultado el concejal opositor Matías
Barsi (UCR – Cambiemos) cuándo el sector político iba a poner de su parte para
hacer frente a la pandemia. Y allí, dijo que estaba preparando un proyecto para
presentar para reducir las dietas de todo el arco político en un 20 por ciento.
A un mes de aquella declaración ante las cámaras de
MERCURIO NOTICIAS, hasta el
momento no ingresó ninguna iniciativa en ese sentido.
Hace un par de días, el concejal opositor Flavio Eckerdt
(UCR-Cambiemos), con motivo de la reunión que mantuvo su bloque con el
intendente Lucas Larrarte, declaró ante
MERCURIO NOTICIAS que “el intendente
nos convocó a la una de la tarde y la reunión era a las seis, así que no
pudimos ni coordinar entre nosotros, pero quedó abierta a una próxima reunión. Le
contemplamos al intendente que nosotros tenemos nuestros trabajos, Patricia
(Sereno) es maestra, yo soy comerciante, Matías (Barsi) es ingeniero está
muchas horas en el campo. Muchas veces necesitamos un tiempo más que el otro
bloque que hoy por hoy tienen un trabajo más aliviado o están más en la
actividad municipal que nosotros”.
La frase da para la polémica, sin dudas. Por un lado,
intenta decir que los integrantes de su bloque tienen trabajos más demandantes
que los oficialistas o bien que los oficialistas tienen más tiempo desocupado
para dedicarse a los proyectos.
Y por otro, lamentablemente, el concejal se olvida que cobra
un sueldo o dieta por haber sido electo. Tiene la obligación de hacerse un
tiempo extra para atender las cuestiones públicas porque para eso fue votado. O
bien que renuncien a sus dietas así no tienen tanta carga pesada. Es vergonzoso
que los representantes del pueblo prioricen sus cuestiones personales antes que
las públicas.
Extraña la actitud porque el concejal Eckerdt peleó por su banca cuando se
enfrentó con la ex precandidata a concejal Cinthia Lambert y el actual edil
Barsi. Hasta lo acusaron de “ladrón de bancas” cuando los otros denunciaron que
se quedó con un lugar que no le correspondía en la lista. Extraña que no le
dedique tiempo a su actividad pública. Si no lo puede hacer, renuncie o al
menos tenga la dignidad, usted y todos, de no percibir haberes, producto de las
tasas de los contribuyentes que aportan a sus sueldos.
Y la frutilla del postre se dio este miércoles a la noche.
El Concejo Deliberante le da la espalda al pueblo e intenta esconder los
problemas que existen en los distintos barrios de la ciudad. Con la excusa de
la falta de tiempo –otra vez- el presidente del cuerpo, Fabio Charles Mengeón,
negó la lectura de una nota de terceros de vecinos de la calle Francisco
Malarín. Es igualmente lamentable que no se tomen tres minutos más para leer
una nota de vecinos con algún reclamo que los aqueja. Es invisibilizar la
problemática existente, más allá de la importancia que tengan o no. Le dedican
varios minutos a leer homenajes que a nadie le importa. O para quedar bien. No
se cansan de leer lo que le escriben para justificar los proyectos, porque no
tienen el más mínimo ápice de intelectualidad para esbozar dos frases seguidas.
Les cuesta leer de corrido, inclusive. No se les puede pedir mucho.
Mientras el Concejo Deliberante se aleja de la gente, los
padecimientos de una comunidad que lucha por salir adelante siguen apretando, en
medio de una pandemia politizada.