En la oficina de San Salvador del IOSPER, Lia Vilches expresó en diálogo con MERCURIO NOTICIAS su preocupación por el proyecto de ley presentado por el gobernador que busca disolver el actual sistema de obra social y establecer uno nuevo.

Según Vilches, "este cambio podría alterar significativamente la naturaleza solidaria de la obra social, sin claridad sobre el nuevo régimen que se implementaría".

Desde la intervención, se han observado cambios en las prestaciones y en la gestión de medicamentos, lo que ha generado confusión tanto entre los trabajadores como entre los afiliados. Un ejemplo de esto es el aumento inesperado de los coseguros, del cual los empleados se enteraron al mismo tiempo que los usuarios del servicio. Además, la transición a un nuevo sistema de medicación agravó los problemas existentes, con dificultades para validar y cargar a los afiliados en el nuevo sistema.

Vilches señaló que, aunque antes de la intervención se tenía una buena coordinación con prestadores y delegaciones, ahora enfrentan problemas diarios que requieren soluciones inmediatas. Esto llevó a que la operación del IOSPER se vuelva "más complicada", similar a los desafíos enfrentados antes de la pandemia.

A pesar de estos problemas, el funcionamiento del IOSPER "se mantiene normal", con los empleados esforzándose por no afectar a los afiliados con posibles medidas de fuerza. Sin embargo, se reportan despidos desde abril y retrasos en el pago de salarios, lo que indica problemas internos significativos que también afectan al personal.

La situación actual refleja una etapa de incertidumbre y desafíos para el IOSPER, con un futuro incierto para sus trabajadores y afiliados mientras esperan más claridad sobre las reformas propuestas.