En la comparación mensual desestacionalizada, se redujeron en un 1,6 por ciento. Las pymes luchan por mantenerse a flote en un entorno económico y financiero sumamente complejo.
Según un relevamiento reciente, la falta de ventas fue el principal desafío para los comercios minoristas durante julio. Los altos costos de producción también representaron una dificultad significativa, con las empresas demandando la reducción de impuestos a nivel nacional, provincial y municipal para restaurar la rentabilidad del sector. Aunque los planes de financiamiento han aportado cierta dinámica al mercado, su impacto es limitado debido a la renuencia de los consumidores a endeudarse, especialmente si esto implica intereses, incluso si son mínimos.
Todos los sectores medidos experimentaron descensos en su actividad durante julio, siendo las mayores caídas observadas en las ventas de farmacias y perfumerías.
Estos datos se desprenden del Índice de Ventas Minoristas PYMES de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), elaborado a través de un relevamiento mensual entre 1.276 comercios minoristas en todo el país, llevado a cabo los días 1 y 2 de agosto.
En el análisis sectorial, en el mes de julio, todos los siete rubros analizados mostraron reducciones interanuales en sus ventas.
La mayor contracción anual se evidenció en las perfumerías (-32,6%), seguida de cerca por las farmacias (-26,4%).